lunes, 29 de julio de 2013

Muy gordo para vivir en Nueva Zelanda (Actualizado)

Actualización (16/09/2013)
Los países están en todo su derecho de aplicar las políticas migratorias que mejor se adecuen para el interés común de sus habitantes, pero esta vez el gobierno de Nueva Zelanda ha cedido un poco en el caso de Albert Buitenhuis y le permitirá quedarse en el país pero bajo cierta condición algo incómoda.


Albert Buitenhuis y su esposa obtuvieron un indulto que les otorga una visa por 23 meses con los que podrán permanecer en Nueva Zelanda, pero con la condición de que Albert no acuda a ninguna entidad de salud pública durante su estadía en el país.

Esta es una victoria agridulce, y no sólo por el hecho de ser relegados de los servicios de salud pública, sino porque durante la lucha perdieron su vivienda y gran parte de sus ahorros, los cuales fueron dispuestos para pagar el litigio legal y en la actualidad la pareja se encuentra tal y como ingresó al país en 2007.

Albert se ha unido a la blogósfera desde agosto con su blog llamado The Too Fat Chef en Blogspot donde expone su punto de vista acerca de su lucha por su permanencia en Nueva Zelanda y también habla sobre asuntos que comprenden su competencia profesional. Ahora Albert se dispone a perder peso para evitar que esto le vuelva a pasar cuando termine la vigencia de su visa, en la actualidad quienes lo han visto dicen que de hecho está logrando perder peso, es posible que el estrés provocado por este percance le haya ayudado a reducir medidas, sólo el tiempo dirá que pasará con este matrimonio. Suerte Albert!
------------------------------------------------------------------------------------------------------------

Artículo Original

Demands: Albert Buitenhuis and his wife Marthie. The couple are being forced from their home as he is too over weight
Albert Buitenhuis, un chef sudafricano que vive en la nación-isla desde 2007, se ha visto en problemas para renovar su visa de trabajo, a pesar de su limpio historial que le ha permitido sin problemas renovar la visa por casi 6 años, algo debió cambiar de forma drástica en el último año. Pues sí, ahora al gobierno neozelandés le preocupa el peso de sus residentes, y tienen razón para estar preocupados, Nueva Zelanda es el tercer país más obeso del mundo, luego de México y Estados Unidos, por lo que seguramente se estén tomando medidas para disminuir tan alarmante tendencia, pero además están tratando de deshacerse de todos los kilos posibles de la manera más rápida.

Esto ha llevado a incluir una condición de peso en la solicitud de visa, y es que desde ahora todo aplicante para una visa en dicho país, debe tener un índice de masa corporal inferior a 35, es por esta razón que Albert es rechazado esta vez, su esposa se muestra consternada por lo sucedido y aboga por que la situación de su esposo se resuelva de forma satisfactoria.

El caso de Albert es algo interesante, al momento de su ingreso al país este chef era incluso más pesado que hoy en día, resulta que ha logrado perder 70 libras después de ganar algo peso al dejar de fumar y ahora ha adoptado hábitos más saludables, sin embargo con 286 libras está todavía por encima del umbral de la obesidad, con un índice de masa corporal de 40.

La mayor preocupación del gobierno es la carga que representarán estos migrantes sobre el sistema sanitario público, y es que los hospitales tendrán que hacer frente a un aumento en la demanda de tratamientos y procedimientos médicos para aliviar y tratar enfermedades derivadas del sobrepeso, como la diabetes y problemas cardíacos. Albert tiene una lesión en la rodilla, y en caso de necesitar una cirugía para reemplazarla, su costo ascenderá a los $20.000 dólares, además del peligro de contraer diabetes y otras enfermadades, hacen que el gobierno vean a este hombre trabajador como una pesada carga para el Estado.

Este es un ejemplo de como la burocracia está desconectada de la realidad, es inflexible e incapaz de resolver nuestros problemas, el Estado velará siempre por lo que considere parte del bienestar de la comunidad, pero en la práctica se reduce a los intereses del partido de gobierno. Nuestras realidades son únicas y nuestros problemas no son los mismos, por tanto no busquemos que alguien de afuera sea quien los solucione.

No hay comentarios.:

Publicar un comentario